sábado, 26 de abril de 2008

Cómo no tratar con un pirata

Me refiero a los somalíes, aunque la fórmula igual valdría para otros piratas, como los nacionalistas, los cineros, los ecologistas y otras tantas especies que pululan por ahí viviendo de lo ajeno.

Nos ilustra Alfonso Rojo:
Arrancar, como ha hecho Moratinos, declarando que España «opta por la vía diplomática», no es un buen comienzo, porque el mensaje que llega a los secuestradores es que pagaremos y que la resistencia se limitará al regateo.

No dejen de leerlo entero.

S-I-E-M-P-R-E

-Ya no está en la web.
-Era de esperar.
-Sí.
-Al fin y al cabo sólo era eso, algo virtual.
-¿Seguro?
-Cada vez más.
-¿Y tú?
-Un instrumento.
-¿...?
-Finalizada mi misión, dejo de ser útil. Y a la papelera.
-Qué pena.
-Sí.
-¿Entonces?
-¿Hmmm?
-¿S-I-E-M-P-R-E?
-Eso creía yo.
-Es mucho tiempo.
-No. Demasiado.
-O una excusa.
-Por ejemplo.
-Oh.

El nacionalismo vasco, por Mingote

Viñeta de ayer viernes, 25 de abril, publicada en ABC.